Turismo
¿Qué tienen que ver los rusos con los camellos?
Tal vez montar un camello en Siberia podría parecer una actividad extraña, quizás tanto como criar camellos para la exportación – una idea loca. Pero en realidad todo esto se hace en Rusia.
¿Carreras de camellos en Siberia y los Urales, empresas de exportación de camellos? ¡Sí, a los rusos les encanta esto! Sin embargo, para montar una empresa de este tipo se necesita tener muchos kilómetros de campos, ser un buen cazador de lobos y tener contactos en la policía de tráfico. Pero en cuanto a todo lo demás, criar camellos en Rusia es fácil. Como dicen los granjeros, “realmente no hay nada especial en ello”.
Había camellos en la Unión Soviética, pero ¿para qué eran?
Recientemente, un camello atacó a dos residentes de un suburbio de Moscú. Resultó que dos camellos vivían en un jardín de una casa privada, pero se les sacaba a pasear como si fueran perros, por la vía pública. Las mujeres se encontraron con los camellos en un bosque de la aldea. Nadie estaba preparado para el encuentro: los camellos estaban en su luna de miel, emocionados, y uno de ellos se puso nervioso y mordió a una de las mujeres.
Sin embargo, esto no es común en Rusia. Los camellos son criados (a escala industrial) sólo en algunos lugares del país. Uno de ellos está en la región de Astracán, no lejos de la frontera ruso-kazaja. Cerca de 500 camellos viven en la granja de Zariá, un antiguo koljoz soviético.
En la URSS los camellos eran percibidos como algo exótico, algo que podía ser llevado a tierra rusa, pero el propósito de ello no estaba claro. Nadie pensaba en las ventas entonces – había subvenciones estatales y eso era suficiente. Ahora todo ha cambiado.
“La fiebre comenzó hace cinco años cuando el alcalde de la ciudad pensó en organizar carreras de camellos … De repente, el ‘exotismo’ se convirtió en una obsesión: zoológicos, compradores privados, gente de Finlandia, Suiza, Noruega. Recientemente enviamos cinco camellos a compradores de Cheliábinsk (entre los Urales y Siberia, a 1.787 km de Moscú) y a una pareja que organiza carreras de camellos”, dice Jalida Yusúpova, presidenta de Zariá desde 1998.
“Este no es un negocio que requiera de una gran inversión. Si tienes un pequeño rebaño de camellos, es barato que tener ganado”, añade Yusúpova.
Los precios de la leche de camello van desde 6.6 dólares a 13.2 dólares el litro y por lo menos 0.6 dólares por un kilogramo de lana, que, según los agricultores, no es mucho.
“Es difícil reproducirlos, nuevas crías al menos cada cinco años, además, los camellos no son conejillos de indias, viven entre 20 y 30 años … Tú comprendes claramente que este animal estará contigo la mitad de tu vida”, comenta Sugunduk, un empleado de Zariá que ha estado criando camellos por más de 30 años.
Si el camello tiene una joroba rota se le sacrifica para proporcionar alimento. “Tenemos centros agrícolas: un camello por semana”, dice Jalida.
Pero en general la principal fuente de ingresos es la venta de la manada: una cabeza cuesta de 420 dólares a 750 dólares.
En todo el verano llueve sólo una vez en la región de Astracán. Los camellos también soportan el invierno. Pero hay algunos problemas con ellos.
“A veces la policía de tránsito nos llama y nos pregunta: ‘Tenemos uno. ¿Es tuyo?”
Los camellos se mueven libremente en un radio de 20-80 kilómetros. Los helicópteros se utilizan para la cría en el extranjero. Pero la gente de Zariá no tiene helicópteros. Al igual que hace 30 años, utilizan los caballos.
“Tenemos la frontera kazaja cerca, pero a los camellos no les importa, la cruzan de todos modos”, sonríe Jalida. “Siempre había imaginado la frontera como se veía en la televisión, pero no es así, una vez que ni siquiera noté que había cruzado la frontera, estuve detenida durante un día y me multaron antes de dejarme volver”.
Ahora los agricultores usan GLONAS (sistema de navegación global). También plantan microchips en los animales. Esto no es barato, pero es eficiente.
Pero algunas cosas permanecen sin cambios. Los lobos son una amenaza real para los camellos en Rusia. Todavía trabajan cazadores de lobos en las granjas. El lobo es rastreado por la mañana sus huellas están frescas. “En general, la caza del lobo es una ciencia y un trabajo insoportable”, resume Jalida.
Ekaterina Sinélschikova