Turismo, Cultura

“Somos plenamente libres. Las mujeres artistas y el surrealismo”

2017-11-08 39 Vistas

Museo Picasso Málaga

Hasta el 28 enero de 2018

  • Las mujeres artistas surrealistas sólo lograron plena libertad y protagonismo como creadoras cuando se rebelaron a las imposiciones sociales y morales de su época. El Museo Picasso Málaga presenta una exposición inédita en España que traza un vasto panorama internacional del innovador horizonte creativo abierto por ellas en el marco del surrealismo.
  • La exposición reúne más de cien obras de dieciocho autoras de diferentes países: Eileen Agar, Claude Cahun, Leonora Carrington, Germaine Dulac, Leonor Fini, Valentine Hugo, Frida Kahlo, Dora Maar, Maruja Mallo, Lee Miller, Nadja, Meret Oppenheim, Kay Sage, Ángeles Santos, Dorothea Tanning, Toyen, Remedios Varo y Unica Zürn.

Esta exposición presenta el trabajo de un grupo de mujeres artistas que a partir de los años treinta del siglo pasado fueron partícipes de un movimiento que históricamente ha sido patriarcalmente asociado a los hombres: el surrealismo. El Museo Picasso Málaga ha reunido para la ocasión obras de dieciocho creadoras que indagaron sobre su identidad y pelearon por su libertad a través del arte, lo que las convirtió en unas revolucionarias que prepararon el escenario cultural necesario para que surgiera el posterior movimiento feminista.

Fundado oficialmente en 1924 con la redacción por André Bretón del Primer Manifiesto Surrealista, el movimiento surrealista fue una actividad artística sobretodo literaria y visual que tuvo lugar principalmente en París, aunque pronto se extendió a otros países como España, Bélgica, Suiza, Reino Unido, México o Estados Unidos.

El surrealismo fue el movimiento de vanguardia que más mujeres aglutinó en sus filas por ser renovador, provocativo y por defender una imagen de la mujer como un ser espontáneo e intuitivo dueño de su intimidad, que, a su vez, como ciudadana, reclamaba tanto el derecho al trabajo o al voto como al disfrute del propio cuerpo. Era un arte que daba importancia a la realidad personal y que facilitaba como medio de expresión la unión de lo erótico con la emoción poética promocionando así el juego de dualidades o la ambigüedad como respuesta al dictado de la razón.

Sin embargo, no pasó mucho tiempo para que ellas se alejaran de un movimiento artístico que les decepcionó porque casi siempre las consideraba en primer lugar como musas, niñas o videntes. Fue un proceso de liberación doloroso, dramático y en ocasiones con finales trágicos, que paradójicamente les facilitó la independencia creativa y la superación del yugo teórico ideológico que los líderes intelectuales del proyecto quisieron imponerles.

Incomprendidas, luchadoras, rebeldes…

En algunos casos fueron eclipsadas o utilizadas perversamente por sus parejas masculinas. Pero sus vidas y su arte no solo retaban las convenciones sociales e institucionales, sino, sobre todo, criticaban con firmeza los efectos represivos que provoca la imposición de normas en razón del tipo de género. “Somos plenamente libres. Las mujeres artistas y el surrealismo” muestra en las obras de estas autoras la emergencia de estos nuevos planos de sensibilidad y su función de contraste con la sociedad patriarcal.

Tenaces, transgresoras y polémicas…

La exposición reivindica un justo protagonismo a un grupo de mujeres artistas cuya producción ha tenido que esperar, quizás demasiado tiempo, para alcanzar un grado de reconocimiento internacional verdaderamente notable y cuyo trabajo destacó en el entorno surrealista. El individualismo y la personalidad de estas mujeres artistas se transmite a través de las más de cien obras de arte entre pinturas, dibujos, esculturas, collages, fotografías y películas reunidas para la ocasión.

Tras “Sophie Tauber-Arp. Caminos de vanguardia” (octubre 2009 – enero 2010), “Hilma af Klint. Pionera de la abstracción” (octubre 2013 – febrero 2014) y “Louise Bourgeois. He estado en el infierno y he vuelto” (junio – septiembre 2015), el Museo Picasso Málaga aborda de nuevo una exposición que pone en valor el trabajo artístico de la mujer en la historia del arte del siglo XX.