Educación

Qué hacer ahora que mis hijos acaban el colegio

2017-07-20 52 Vistas

Ha llegado el verano, por fin, y con él las ansiadas vacaciones tanto de los padres como de los hijos. Más de dos meses van a estar nuestros hijos sin tener que ir al cole y a muchos padres se nos pasa una pregunta por la cabeza,  qué hacer con los niños durante el verano para que no se aburran? La opción más atractiva para padres e hijos es un campamento de verano.

Permitirá a los hijos disfrutar de unos días diversión asegurada y, a los padres, un tiempo para ellos mismos para desconectar de las responsabilidades diarias. Ambas partes, tanto padres como hijos, disfrutarán de una o dos semanas diferentes al resto del año.

Los primeros tras un año compaginando el trabajo en casa, con el cuidado de los hijos y el trabajo fuera de casa, van a poder disfrutar de unos días diferentes, con más tiempo libre de lo habitual. Los segundos, deseosos de empezar sus vacaciones, van a pasar una semana rodeados de otros niños, viviendo experiencias inolvidables y en un ambiente ideal para su desarrollo personal.

Todo esto supervisado por un equipo de profesionales cualificados que van a estar pendientes de ellos las 24 horas del día para la tranquilidad de los padres. Tus hijos estarán atendidos para cualquier necesidad durante el tiempo que pasen en el campamento de verano.

MOTIVOS PARA LLEVAR A TUS HIJOS DE CAMPAMENTO:

  • Diversión. El verano es muy largo y tus hijos tienen tiempo para hacer todo tipo de actividades, por lo que una o dos semanas en un campamento de verano les va a permitir probar nuevas experiencias en un ambiente excepcional.
  • Contacto con la naturaleza. Algo que no realizamos durante el año y que nuestros hijos pueden disfrutar mediante actividades de senderismo o deportes al aire libre.
  • Inmersión lingüística. Sin duda un factor diferencial para elegir el mejor campamento de verano es la posibilidad de que tus hijos desarrollen un segundo idioma al vez que disfrutan de todas las actividades programadas.
  • Crecimiento personal. Tras una o dos semanas relacionándose con otros niños de manera independiente, los niños experimentan una aumento del sentido de la responsabilidad y una mayor autonomía en el día a día.

Por estos y más motivos, mandar a tus hijos a un campamento de inmersión lingüística es una opción más que recomendable para que los niños pasen unos días en la naturaleza, relacionándose con otros niños y que, cuando vuelvan, lo único que piensen sea en volver el año que viene.

Toda la información sobre campamentos de verano en www.vorwaerts.es

Raul R. Noergia